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Lago de Genesaret ('Kinneret', en hebreo), a veces llamado mar de Galilea, visto desde Cafarnahum (Galilea, Israel),

en octubre 2013.

 



El objetivo de mi trabajo es difundir la visión científica que de Jesús de Nazaret tienen la historia y las ciencias afines a ella, utilizando un lenguaje comprensible para poder llegar al público general.

 

¿Cómo me he propuesto hacerlo?

 

 

La aldea de Betsaida (renombrada 'Julias' por Herodes Filipo, uno de los hijos de Herodes el Grande) se encuentra en mal estado de conservación. En esencia, pueden verse los cimientos, las primeras líneas de los muros de las casas y hacerse una idea del trazado urbano. Pedro y su hermano Andrés (así como el apóstol Felipe) eran oriundos de Betsaida (Jn 1,44), pero residían (al menos Pedro) en la vecina Cafarnahum, ganándose la vida como pescadores. Las dos poblaciones, aunque muy cercanas, pertenecían a territorios diferentes: la primera a la Gaulanítida, tierra de Filipo, y la segunda a Galilea, bajo autoridad de Herodes Antipas, hermano del anterior. En la foto, una casa que, se piensa, pertenecía a un viticultor (octubre 2013).

 


 

Escribiendo una novela –un ensayo, mejor dicho–, tomando como base el Jesús de la historia y no el Cristo de la fe. Realizarlo me llevó algo más de siete años de laborioso trabajo y ahora, espero que haya valido la pena.

 

De joven me licencié en historia, pero eso no basta para entender al personaje. Lamentablemente, no basta en absoluto. De hecho, por lo que yo recuerdo, su figura no entró físicamente en ningún temario y quedaba circunscrita a las dataciones (e.g. cerámicas, guerras, periodos, etc.). Pero su vida o simplemente su historicidad no eran abordadas, ni siquiera someramente. Tampoco en arqueología del cristianismo, que situaba su inicio en el s.IV, cuando un cristianismo ya tolerado empezaba a dejar huellas físicas (más allá de las catacumbas).

 

Eso implica que aunque los estudios universitarios proporcionen formación sobre metodología, sobre selección y analisis de fuentes (escritas o no), o sobre distintos contextos históricos vinculados (el Imperio Romano, las sociedades mediterráneas de la antigüedad, las sociedades helenísticas), para profundizar en temas básicos y necesarios como el judaísmo antiguo, el Nuevo Testamento, el Antiguo Testamento, Qumrán, la literatura rabínica, el derecho romano, los yacimientos arqueológicos... y especialmente sobre la vida de Jesús, uno debe dedicar mucho tiempo por su cuenta a conocer bibliotecas, manejar revistas especializadas, asistir a conferencias, estar al día del estado de la cuestión en los principales temas y sobretodo leer. Leer mucho y de todas las perspectivas posibles (historia, arqueología, filología, numismática, sociología, y también teología: judía, protestante, católica...). Conocer autores del pasado y actuales; confesionales y aconfesionales; alemanes, anglosajones, españoles (!),...; profesores universitarios y pensadores independientes.  Y ser crítico, con todo el material que se estudia y con uno mismo.

 

Por todo ello, antes de escribir un capítulo, dediqué tres años a documentarme y empezé a escribir un análisis histórico sobre el personaje. Al principio, lo hice para mí, pues ello daba respuesta a las preguntas que me iban surgiendo para estructurar la novela.

 

Y empecé luego a escribir la novela. Desde entonces, análisis histórico y novela avanzaron juntos, despacio, unos cuatro años más, madurando, hasta terminar.

 

Gracias a ello, la novela es rica en notas históricas, que van al pie de página para no cortar la lectura; y el lenguaje de la obra es intencionadamente asequible para cualquier lector, incluido el adolescente.

 

¿Qué dijeron las editoriales cuando se les presentó esta obra doble?

 

 

Aquí puede verse la calle más comercial del Jerusalén de la época de Jesús, rodeada de tiendas a ambos lados. Las tiendas al pie del templo no se conservan, pero sí, parcialmente, las del lado opuesto, donde se agrupan los turistas, mostrando cuatro puertas rectangulares. El sistema de cloacas quedaba debajo de la calle y seguía el declive que tenía el valle del tyropeon, un pequeño torrente que cruzaba la ciudad de NW a SE (Jerusalén, Israel. Octubre 2013).

 


 

En líneas generales, las editoriales no invierten dinero en una obra sino creen que ella les va a generar una rentabilidad aceptable. Eso significa –especialmente si es una novela larga–, la necesidad de un autor mediático o de reconocido prestigio que esté detrás. Para abreviar, resumo su opinión con algunas de las frases que me llegaron: ‘me gusta, pero hay demasiadas notas al pie’, ‘sería difícil de vender’, ‘es un autor desconocido, sin marca’,...

 

Muy bien. Por eso este autor ‘sin marca’ publicará, en esta web y en abierto, un tercio amplio de la novela, para que todo lector interesado pueda valorarla.

 

Y publicaré también en abierto, una parte del trabajo de análisis y recapitulación histórica que hice del personaje –tan objetivo y detallado como me fue posible–, en el que consulté cerca de 400 obras de más de 200 especialistas de distintos países y creencias, desde mediados del s.XIX hasta hoy. El trabajo justifica –todavía más ampliamente que las notas–, las decisiones históricas tomadas en la novela.

 

 

¿Cuándo lo haré? El día 23 de abril de 2016, san Jorge y día del libro.

 

 

En el mes de mayo, tanto la novela como el análisis histórico –ambos íntegros–, saldrán a la venta. El trabajo histórico saldrá publicado solo en formato digital (dada su magnitud: 1.600 pp.), y a un precio muy reducido. La novela se editará solo en formato libro y buscando un precio tan económico como sea posible, dada su considerable extensión (489 pp.).

 

Debo añadir que, aunque la novela está terminada, sigo ampliando y revisando el trabajo histórico. Espero algun día poder terminarlo.

 


Si te interesa el tema, si te has preguntado alguna vez

quien fue Jesús de Nazaret o si el cristianismo

ha sabido transmitir su mensaje con acierto,…

puedes empezar leyendo esta novela.

No te arrepentirás y entenderás muchas cosas.

Los que la han leído, así me lo han dicho.

 

Y sí, habrá más de cien novelas sobre Jesús de Nazaret;

incluso muchas más, lo sé.

Pero el rigor histórico que hay en esta

–a pesar del riesgo que supone novelar ciertos pasajes

en los que no hay suficientes datos–,

la vuelve creo,… única.

 

Y si la lees –en una parte o en su totalidad–, lo verás.

 

Y luego, si quieres, me escribes y colgaré tú opinión.