Para el estudio del Jesús histórico - Libros de interés



En la imagen de la izquierda puede verse el famoso muro del templo de Jerusalén (lado oeste), donde los visitantes dirigen sus ruegos, y que queda ubicado a la izquierda de la pasarela que lleva a la explanada del templo (hoy explanada de las mezquitas). La cúpula de la roca (la mezquita con la cúpula dorada) se sitúa aprox. en el lugar donde se elevaba el Santuario del Templo, lugar más sagrado del judaísmo, y cuyo paso era accesible solo a judíos, so pena de muerte. Pablo de Tarso fue acusado de querer entrar en él con el pagano Trófimo y por eso fue apaleado y capturado (Hch 21,27-36).

 

En la imagen de la derecha puede verse, parcialmente, el lado sur del templo y la mezquita de Al-Aqsa con su cúpula grisácea. Al pie del templo se encuentra el Jerusalem archeological park, que permite ver restos dispersos del s.I (la época de Jesús). La construcción adosada al muro, bajo la mezquita, es del s.XII, cuando los criuzados ocuparon la ciudad (octubre 2013).


A continuación, os cito algunos libros de interés para el estudio de la materia y que clasifico por temas:


           1. Libros de base: Es necesario tener la base adecuada y eso se traduce en traducciones lo más fieles posibles a los textos originales del NT (Nuevo Testamento), la fuente básica para conocer a Jesús. Por ello, recomendaría los dos libros que yo he utilizado para escribir la novela:

  • Para una lectura correcta de los evangelios (incluidos los Hechos de los Apóstoles), la obra editada por el profesor Antonio PIÑERO SÁENZ, Todos los evangelios. Canónicos y Apócrifos. Ed. EDAF. Madrid, 4ª ed. 2012. Representa una rigurosa traducción al castellano de todos los evangelios del NT (canónicos y apócrifos), confeccionada desde sus originales respectivos (griego, copto, siríaco,…), obviando interpretaciones, ciñéndose a los textos, y hecha por un equipo de expertos vinculados todos ellos al ámbito de la filología griega clásica, colaboradores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), así como de otras universidades españolas. Contiene, además, breves notas al pie de página relativas al contexto, a la traducción, así como a los pasajes del Antiguo Testamento que allí se encuentran citados. 
  • Para una lectura de los demás libros del NT, así como del AT, recomiendo la Biblia de Jerusalén (cuya última edición, si no voy equivocado, es de 2009, publicada por la editorial Desclée de Brouwer).


 2. Libros de base (2): leer el NT sin conocer nada sobre él, implica una comprensión muy reducida. Por eso os recomiendo vivamente una guía para entender mejor los textos canónicos. Os señalo dos:

 

  • Del citado Antonio PIÑERO, Guía para entender el Nuevo Testamento. Ed Trotta. 2ª ed. Madrid, 2007, probablemente, una de las mejores obras de este autor, especialista en filología griega, donde proporciona una explicación y un marco histórico al NT que son fundamentales para comprenderlo. El autor utiliza un lenguaje asequible y lo transmite con sencillez, de forma que esta obra, opino, puede servir a todo tipo de público interesado. Además, se dedican dos capítulos a la figura histórica de Jesús, con una opinión razonada.   
  • La magna obra de uno de los teólogos católicos más renombrados Raymond E. BROWN, Introducción al Nuevo Testamento. I. Cuestiones preliminares, evangelios y obras conexas. II. Cartas y otros escritos. (An introduction to the New Testament, 1997). Ed. Trotta. Biblioteca de Ciencias Bíblicas y Orientales. Madrid, 2002. Aunque es una obra de más de mil páginas (en dos tomos), existe un notable esfuerzo de síntesis para tratar los principales aspectos de cada libro del NT. En la primera parte, donde se abordan los evangelios, los Hechos y las cartas joánicas, se incluyen cinco capítulos dedicados propiamente a lo que es el NT (naturaleza del NT, formación del canon, textos manuscritos que lo conforman, marco histórico y religioso,...). La segunda parte aborda la totalidad de las cartas neotestamentarias: paulinas, deuteropaulinas y católicas (exceptuando las de Juan), más el apocalipsis. En su conjunto es una buena obra, aunque el perfil ideológico del autor, en nuestra opinión, oscurece algunos puntos (véase, por ejemplo, p.172, sobre la verdad de los evangelios, o p. 305, sobre la concepción virginal).



Puertas de Hulda. Las dos imágenes forman parte del mismo lado sur del templo de Jerusalén. La escalinata llevaba a estas puertas de acceso al templo, que eran utilizadas por el pueblo llano, pues los nobles y altos sacerdotes que vivían en la Ciudad Alta, solían entrar al templo por la hoy llamada puerta de Wilson. En la imagen izquierda puede observarse, en la parte izquierda y sobre las escaleras, una pequeña parte de la puerta de entrada al templo, que era una puerta doble, aunque hoy queda casi totalmente tapiada por la construcción que realizaron los cruzados. En la imagen de la derecha, se intuye la puerta triple (de salida del Templo), formada por tres arcadas, también tapiada. Es coherente pensar que Jesús y su grupo subieron por esta escalera y utilizaron estos accesos al templo en alguna ocasión. Octubre 2013.


       3. El judaísmo en la época de Jesús: este es el contexto histórico esencial para enmarcar al personaje y sus acciones. Para ello os recomiendo:

 

  • La obra fundamental es la del historiador judío romanizado del s.I Flavio JOSEFO. Escribió cuatro obras, de las que destaco sus Antigüedades Judías, (Edición de José Vara Donado. Tomos. I y II. Ed. Akal. Col. Clásica, 45.  Madrid, 1997), célebre por incluir el testimonio sobre Jesús (testimonio flaviano: Ant. Jud., libro XVIII 63-64). Contiene otras referencias a personajes del NT como Juan el Bautista, Poncio Pilato, Santiago el hermano de Jesús, o los sumos sacerdotes Anás y Caifás. El volumen 1 contiene los libros I al XI, y el volumen 2 los libros XII al XX. En el segundo volumen se encuentra el testimonio flaviano, así como la muerte de Santiago y la de Juan el Bautista. El autor repasa la historia del pueblo judío y da un análisis detallado de especialmente de los hechos acontecidos entre los siglos II a.e.c. a I e.c.
  • Obra clásica de referencia es la del erudito alemán del s.XIX Emil SCHÜRER, Historia del pueblo judío en época de Jesús (175 aC – 135 dC). (Geschichte des judischen volks im zeitalter Jesu Christi, 1890). Ediciones cristiandad. Madrid, 1985. Se estructura en dos tomos: del primero (tomo I. Fuentes y marco histórico), destaco sus comentarios a la obra de Flavio Josefo, así como el extensísimo análisis que hace del famoso censo de Quirino – mencionado por el apóstol Lucas (Lc 2,1-7), como causa del nacimiento de Jesús en Belén –, y su conclusión, que muestra el error del evangelista. Del segundo (tomo II. Instituciones políticas y religiosas) su explicación detallada del funcionamiento del sanedrín de Jerusalén y de las sinagogas. Esta edición está revisada por tres destacados autores modernos, Geza Vermes, Fergus Millar y Matthew Black, quienes han actualizado la biografía que existía en cada capítulo (la obra de Schürer es de finales del s.XIX), así como han añadido nuevos datos procedentes de otras disciplinas como la arqueología, la epigrafía, la numismática, y nuevo material como los manuscritos de Qumrán, desconocidos lógicamente en la época del autor.
  • Del teólogo y erudito judío, recientemente fallecido, Geza VERMES, Jesús el judío. Los evangelios leídos por un historiador (Jesus the jew, 1973) Ed. Muchnik Editores. 4ª ed. Barcelona, octubre 1997. El libro se divide en una primera parte que enmarca al personaje dentro del judaísmo de la época, considerándolo como un jasid galileo, es decir un hombre piadoso que rige su vida según la Ley y es conocido por su carisma e inclusive su taumaturgia. Los taumaturgos son hacedores de milagros que cuentan con la gracia de Dios, como lo fueron otros jasidim galileos contemporáneos a Jesús llamados Hanina ben Dosa y Honi, el trazador de círculos. En una segunda parte hace un estudio del personaje, pero esta vez en base al estudio de los títulos que recibió, es decir, profeta, mesías, hijo de Dios e hijo de David, llegando a la conclusión que casi todos le fueron atribuidos con posterioridad a su muerte y que, en todo caso, la excepción, además de ser el único con el que Jesús estaría más de acuerdo, sería el de profeta (Lc 7,16), que es precisamente el que la iglesia primitiva más prontamente hizo desaparecer. Niega por tanto que Jesús se considerase el ‘mesías’.


      4. Sobre el Jesús histórico: hay muchos libros. Os recomiendo dos, de autores muy reconocidos, asi como un tercero sobre una cuestión puntual que, a menudo, se ha deformado:

 

  • Del profesor de teología protestante estadounidense Edward Parish SANDERS, La figura histórica de Jesús (The historical figure of Jesús, 1993). Ed. Verbo divino. Estella, Navarra, 2000. La obra es un estudio sobre la figura de Jesús, donde su autor aplica la lógica y el buen tino en su descripción. Este es, en mi opinión, un libro muy notable, que repasa la vida de Jesús con lógica y aplicando el conocimiento histórico. Excelente es su aproximación a los milagros (cap. 10). Su retrato del judaísmo del s.I. (cap. 4) es notorio, pero consideramos que el judaísmo común no sea tal vez, motivo suficiente para unir a todos los judíos en un solo grupo. Precisamente, las discrepancias internas entre los judíos fue uno de los puntos débiles en su lucha contra Roma. Estamos plenamente de acuerdo con su interpretación del incidente del templo como un acto simbólico y escatológico, en el que Jesús probablemente pretendía promover una intervención divina definitiva y la irrupción del reino.
  • De los teólogos protestantes germanos Gerd THEISSEN y Annette MERZ, El Jesús histórico. Manual. (Der historische Jesus. Ein Lehrbuch, 1996) Ed. Sígueme. Salamanca, 1999. Como bien reza el subtítulo, esta obra es un manual bastante completo sobre el Jesús histórico. (Hay incluso tareas puestas al final de cada capítulo para que el lector/alumno las realice, confirmando la finalidad didáctica del manual). La obra está estructurada en una introducción, seguida de una parte inicial donde se estudian todas las fuentes (cristianas o no) sobre el tema, para a continuación rebatir, punto por punto (en total 13), las críticas más conocidas dirigidas contra aquellos que se dedican al estudio del Jesús histórico. Luego empieza propiamente el libro, que se divide en tres partes. Una primera donde se detallan los diferentes marcos históricos: el marco cronológico, el religioso, el geográfico y el propiamente histórico en el que vivió Jesús. Una segunda parte dedicada a la actividad y predicación de Jesús, y una tercera dedicada a la Pascua, pasión y resurrección.
  • También de Antonio PIÑERO, Jesús y las mujeres. Ed. Aguilar. Madrid, 2008, un estudio de todos los pasajes evangélicos en los que Jesús tiene relación directa o indirectamente con mujeres, y que ofrece también un retrato de la mujer en el Israel del s.I (cap. 2).
  • Del investigador de la UB Fernando BERMEJO RUBIO, La invención de Jesús de Nazaret. Historia, ficción, historiografía. Ed. Siglo XXI. Madrid, 2018. Esta es una obra compendio del trabajo de un autor de gran erudición, que publica mucho en revistas especializadas de prestigio (incluidas internacionales), y que es un gran conocedor de la historiografía pasada y presente. Esta obra requiere, en mi opinión, conocimientos previos en la materia. Es un trabajo de enorme profundidad, con multitud de evidencias recopiladas, que obliga al lector a reflexionar continuamente sobre todos los temas que aborda.

 



Al SW de la Ciudad Vieja de Jerusalén, hoy extramuros, se encuentra la Iglesia de San Pedro del Canto del Gallo. Para algunos autores esta podría edificarse sobre la casa del sumo sacerdote Caifás, donde Jesús fue interrogado y en el patio de la cual Pedro negó a su maestro antes de que cantara el gallo (Mc 14,66-79). Lateralmente a ella, puede verse una escalera empedrada, que estaba en vigor en el s.I. Sin embargo, se cree más probable que Caifás, sumo sacerdote, habitara en la cima de la colina y no tan abajo.


La imagen en relieve de la puerta de la iglesia muestra a Jesús (en azul), indicando a Pedro (en rojo) que esa misma noche le negaría tres veces antes de que el gallo cantara dos (Mc 14,30), (octubre 2013).


        5. La arqueología en el estudio del Jesús histórico: los estudios arqueológicos (y sus continuos avances) son esenciales para el conocimiento del contexto arqueológico de la época en que vivió Jesús. Los textos por sí solos resultan incompletos si se tiene acceso a los restos materiales. Preguntas del tipo: ¿cómo eran las sinagogas del s.I?, ¿cómo vivían los distintos grupos judíos del s.I?, ¿cómo eran los edificios públicos?, etc, tienen respuesta principal en la arqueología.

  • Una obra de referencia es la dirigida por el profesor de lengua y literatura del NT James H. CHARLESWORTH, Jesús y la arqueología (Jesus and Archaeology, 2006). Verbo divino. Navarra, 2009, que reúne a participantes del llamado Simposio del Milenio celebrado en Jerusalén. Charlesworth, que es un defensor de la aplicación de la arqueología al NT y al estudio del Jesús histórico, recopila aquí trabajos monográficos de diferentes autores, acerca de cuestiones relativas a esta temática.
  • Aquí en España un arqueólogo especializado en el Jesús histórico y en Tierra Santa es el, recientemente fallecido, Joaquín GONZÁLEZ ECHEGARAY, de quien recomiendo Arqueología y evangelios. Ed. Verbo divino. Navarra, 1994. Como ya explica en el prólogo, está dirigida al público en general, para la difusión de los conocimientos arqueológicos en Tierra Santa pues, a menudo, llegan con retraso. Para el lector o estudiante interesado, se proporciona una buena bibliografía en cada capítulo. Lo único que reprocharía al autor es que su intención sea “exponer el contexto arqueológico que sirve de ambiente a la narración, sin ir más allá.” (p.243), es decir sin pronunciarse sobre si la opción expuesta tiene visos de autenticidad o no.

 



     6. Sobre las sociedades mediterráneas de la antigüedad: este es el segundo de los contextos históricos necesarios que se necesitan para entender al personaje y como funcionaba el mundo de su época. A veces es olvidado.

 

  • La antropología cultural permite una mejor comprensión del contexto de cada lectura neotestamentaria en un marco correcto, el mediterráneo oriental del s.I. En este campo recomiendo dos obras del teólogo protestante Bruce J. MALINA La primera es El mundo social de Jesús y los evangelios (The social world of Jesus and the gospels, 1996). Ed. Sal terrae. Col. Presencia teológica nº 116. Cantabria, 2002. Malina es uno de los fundadores del llamado ‘context group’, que intenta entender los textos del NT a la luz de disciplinas como la antropología cultural, la sociología y la psicología social. Su enfoque de las sociedades mediterráneas del s.I como marco de referencia para abordar los textos del NT parece muy válido y francamente, revelador. Vale muy la pena conocer como este autor expone y desarrolla los valores de este tipo de sociedades: honor-vergüenza, patrón-cliente, patriarcalismo,… El capítulo 8, donde contrapone dos formas de estudio, la concepción heredada y el método científico-social merece ser leído por cualquier estudiante o profesional de las ciencias sociales. A destacar también el importante rol de la virginidad en estas sociedades como forma de mantener la cohesión familiar basada en códigos de pureza, y la explicación de la importancia de la virginidad de María en relación al honor de Jesús.
  • La segunda obra de Malina es El mundo del Nuevo Testamento. Perspectivas desde la antropología cultural. (The New Testament world. Insights from cultural antropology, 1994). Verbo Divino. Estella, Navarra, 2009. Su obra, dirigida tanto al público interesado como a estudiantes, se acompaña de varios ejemplos ilustrativos. Se estructura en seis capítulos, cada uno de las cuales termina con un resumen y una bibliografía orientativa. A resaltar los dos primeros capítulos: el primero una introducción a la temática, con ejemplos, y el segundo dedicado al honor y la vergüenza, que amplía el de la primera obra. Ambos acompañados con ejemplos del NT. Introduce además, comparativas entre el contexto de esa época y el contexto actual de la sociedad norteamericana, que el autor conoce muy bien, y cuyo contraste resulta interesante.
  • En España, dentro de la antropología cultural aplicada al estudio del NT destaco la obra del teólogo y filósofo Rafael AGUIRRE MONASTERIO. Recomiendo, por ejemplo: La mesa compartida. Estudios del Nuevo Testamento desde las Ciencias Sociales. Ed. Sal terrae. Cantabria, 1994.  


La aldea de Cafarnahum (Galilea, Israel) parece haber sido el centro de operaciones desde donde Jesús y su grupo predicaron en Galilea. La casa de Pedro (imagen superior) se encontraba enfrente de la sinagoga (la llamada sinagoga negra). Lamentablemente en nuestra opinión, hoy se ha edificado una iglesia sobre ella que impide ver bien la casa del apóstol. Jesús habitaría aquí, en casa de la suegra de Pedro, a quien curó de unas fiebres (Mc 1,29-31). És típico en las sociedades mediterráneas de la antigüedad que si alguien con honor recibe un favor, lo devuelva. La piedra basáltica negra es típica de la región, como vimos también en la aldea de Betsaida (octubre 2013).


    7. Sobre el cristianismo primitivo: el conocimiento de este tema permite diferenciar con más facilidad lo que pertenece al Jesús de la historia y aquello que después se le fue añadiendo.

 

  • Del profesor de historia antigua J.M. BLÁZQUEZ MARTÍNEZ et álii, Cristianismo primitivo y religiones mistéricas. Ed. Cátedra. Historia. Serie Mayor. Madrid, 1995, que ha sido utilizada en distintos temas – incluido el NT, Jesús de Nazaret o los manuscritos del Mar Muerto –, haciendo aportaciones claras y precisas sobre cada uno de estos temas. Recordemos que el judaísmo que recibió Jesús, llevaba ya adheridos numerosos de estos elementos helenísticos (y del mundo iranio), entre ellos la inmortalidad del alma, que pasarían luego al cristianismo.
  • Del profesor de NT estadounidense Bart D. EHRMAN, Cristianismos perdidos. Los escritos proscritos del Nuevo Testamento. (Lost christianities. The battles for Scripture and the faiths we never knew, 2003). Ed. Ares y Mares (ed. Crítica), Barcelona, 2004, que hace un repaso a las diferentes tendencias que tuvo el cristianismo en los primeros siglos. La segunda parte de la obra incluye el estudio de las tres ramas principales del cristianismo primitivo: los judeocristianos, los gnósticos y la rama protoortodoxa, que será la vencedora.
  • Del teólogo católico Senén VIDAL, Pablo. De Tarso a Roma. Ed. Sal terrae. Santander, 2007. Muy didáctica y bien razonada, puede considerarse distribuida en tres partes: una inicial, muy breve, dedicada a la metodología sobre el tema, un retrato biográfico de Pablo, y finalmente, una tercera parte donde se debate sobre el mensaje paulino. Me parece bastante acertada su visión de la vida de Pablo.



El túnel de Ezequías fue construido a finales del s.VIII a.e.c. por este rey hebreo en previsión de un asedio sobre Jerusalén. La fuente principal de abastecimiento de agua para la ciudad se encontraba fuera de muralla y el monarca, prudentemente, decidió construir un túnel subterráneo que comunicara la fuente con una cisterna que sí quedaría dentro de muralla: la piscina de Siloé. Jerusalén pudo así resistir el cerco del rey asirio Senaquerib. Cuesta entender como, con los rudimentarios medios de la época, dos grupos de excavación, que empezaron respectivamente en un extremo distinto, consiguieron encontrarse tras más de medio kilómetro de recorrido sinuoso. Una placa conmemorando el encuentro fue encontrada. El túnel puede visitarse y forma parte de lo que se conoce como Pozo de Warren (Jerusalén, octubre 2013).


      8. Sobre el Antiguo Testamento: si tuviera que recomendar una visión de la historia del pueblo hebreo, la haría con este libro, es decir, de la mano de la arqueología. No deja indiferente.

  • La obra del arqueólogo israelí Israel FINKELSTEIN y el historiador Neil ASHER SILBERMAN, La Biblia desenterrada (The Bible unearthed. Archeology’s New visión of Ancient Israel and the origin of its sacred texts, 2001). Siglo XXI de España Editores. Madrid, abril 2003, aparece como claramente desmitificadora de un pasado glorioso, siendo mucho más realista al traducir los datos arqueológicos. Los dos autores hacen un resumen de la información obtenida hasta ahora con métodos científicos, para interpretar el Antiguo Testamento. El lector encontrará, tal vez, sorprendente algunas de las hipótesis que se exponen, bien documentadas arqueológicamente. Aunque Jesús de Nazaret no sea objeto de estudio en este libro, la obra permite entender mejor la forma que tenía el pueblo judío de narrar los sucesos de su pasado y el objetivo que le llevó a hacerlo; donde la figura del rey Josías cobra una importancia fundamental. A destacar el capítulo 2 sobre el Éxodo y el capítulo 3 sobre el origen de los israelitas.